La experiencia de onboarding es una de las fases del ciclo de vida del empleado en la que se realiza la presentación inicial de tus nuevos empleados a la empresa.
El ciclo de vida del empleado es un concepto que hace referencia a todas las fases por las que atraviesa un profesional durante su etapa en una empresa. En cualquier caso, el enfoque más extendido entre los departamentos de Recursos Humanos, pasa por abordar el ciclo profesional de cada empleado en tu empresa, teniendo en cuenta una serie de etapas que se cumplen en la gran mayoría de los trabajadores.
El empleado, pasa por una serie de etapas en las que los estímulos que recibe por parte de la empresa pueden ser determinantes para que exponga su máximo potencial.
En este post, nos centraremos en la fase número 3, el proceso de onboarding. Un buen proceso de onboarding te ayudará a reducir la tasa de rotación y a mejorar la productividad de tus nuevos empleados.
¿Por qué es importante un proceso de onboarding exitoso?
El proceso de onboarding es una de las fases cruciales en el proceso de reclutamiento de nuevo talento para tu compañía. Esto, queda demostrado con los datos contrastados del último año:
- El 22% de los trabajadores abandonan su nuevo empleo en los primeros 45 días.
- Un proceso de onboarding adecuado puede aumentar la retención del talento en un 82% y la productividad en un 70%.
- Se estima que el 54% de las empresas con un proceso de Onboarding establecido logran un nivel mayor de compromiso por parte de sus empleados.
- Las compañías con planes más completos de Onboarding, logran un 34% más de eficiencia en sus empleados.
- En España, las empresas cuentan con un 30% de rotación de personal, siendo este uno de los principales costes para las compañías.
Por ello, te mostraremos en este post una serie de pautas y consejos para diseñar un proceso de onboarding exitoso que asegure la retención del talento en tu compañía, reduciendo el absentismo laboral e impulsando los índices de productividad.
Beneficios del onboarding de empleados
Un buen proceso de onboarding conduce al éxito con un impacto directo en los resultados de negocio. Una buena implementación del mismo tiene beneficios tanto para la empresa como para los trabajadores, porque:
- Reduce los costes de contratación. Al evitar que los nuevos empleados abandonen su puesto de trabajo, la empresa ahorra dinero. Dado que no tiene que realizar nuevos procesos de reclutamiento y selección de personal para conseguir un nuevo candidato.
- Incrementa la retención del talento. Se reducen considerablemente las posibilidades de que los trabajadores con un mayor nivel de cualificación abandonen la empresa.
- Aumento de la productividad. Los trabajadores sienten un mayor nivel de implicación con tu marca y están más contentos, impulsando por ende los índices de productividad.
- Más identificación con la marca. Al desarrollar un mayor nivel de participación del nuevo empleado en las actividades de la empresa, este se siente más involucrado con la empresa y sus valores.
- Mejor coordinación con los equipos de trabajo. Una de las funciones del onboarding tiene como objetivo que los nuevos empleados se relacionen con sus compañeros de trabajo. Esto facilitará el trabajo en equipo.
- Mejora la imagen de la empresa. Al incorporar a los nuevos empleados e integrarlos con un plan de onboarding, posiciona a la empresa de forma positiva. Pone de manifiesto la importancia que esta le da al desarrollo e impulso del talento.
Paso a paso para diseñar un buen plan de onboarding
Un buen plan de onboarding es una de las formas más fáciles para garantizar que tu proceso de incorporación de nuevos empleados incluya aquellos elementos para integrar de forma completa a los nuevos empleados en tu empresa. Aunque debemos considerar que el onboarding no es genérico para todos los empleados, en ese caso, hablaríamos de un proceso de inducción.
1. Establece el proceso
En esta primera fase, se deben tener en cuenta cuáles son los valores, la misión, la cultura y la estrategia de negocio que tiene la empresa para poder transmitirlos con la mayor claridad a los nuevos empleados. Aunque en esta etapa, no podemos olvidar aquellas acciones o tareas que están directamente relacionadas con los procesos documentales necesarios en cualquier nueva contratación.
Antes del primer día, también puedes considerar dejar una nota en el escritorio del nuevo empleado para darle la bienvenida al equipo.
En los últimos años, han ganado gran peso las estrategias que incorporar regalos corporativos para el nuevo empleado. Esto impulsará su proceso de identificación con la marca desde el primer momento. Tanto para un proceso de onboarding presencial como digital, podemos enviar un correo electrónico de bienvenida junto a un kit de materiales de marca. Puedes conocer como crear un kit de bienvenida o welcome pack para empleados exitoso.
2. Planifica el primer día
Cuando tus nuevos empleados se presentan el primer día, seguramente ya tendrán creadas algunas expectativas sobre la empresa y sobre las tareas que desempeñarán. No obstante, existen algunos factores que seguramente desconocen.
Un paso importante en este punto puede ser generar un “Plan de 30 días” para mantener al empleado interesado y entusiasmado durante su primer mes de trabajo. Este plan, debe incluir:
- Personas a las que sugieres que se acerque para mantener una sesión inicial.
- Lecturas de material que le ayudarán a tener éxito en su nuevo rol.
- Las expectativas que la empresa tiene sobre el nuevo empleado en su primer mes.
Es importante mantener al nuevo empleado ocupado y comprometido durante su primer mes en la compañía. Debes demostrarle que te has tomado el tiempo para planificar un día a día completo y productivo para él o ella.
3. Pasa a la ejecución
Las primeras impresiones que genere el nuevo empleado sobre la empresa y el equipo serán determinantes para que se construya una buena relación laboral. Esto, hace que sea necesario que conozcas un poco más del nuevo empleado y que le permitas saber más del equipo y de la empresa. De la misma forma, es un periodo bastante útil para poner a prueba sus habilidades.
Para ello, puedes introducir en sus primeras semanas encuestas, formularios y tests, como el test DISC (Dominancia, Influencia, Sumisión, Conformidad).
No olvides mantener al nuevo empleado involucrado en todo aquello que está sucediendo en el equipo. En este aspecto, puedes invitarlo a participar en aquellas reuniones que aunque a día de hoy no están directamente relacionadas con sus tareas, podrían ser útiles para su crecimiento en su puesto.
4. Da seguimiento y evalúa
Las primeras semanas del nuevo empleado en un puesto de trabajo seguramente estarán llenas de dudas, errores y aprendizajes. No obstante, no debemos olvidar que el onboarding no acaba con el proceso de inducción del nuevo empleado.
Al finalizar el proceso de inducción, es importante solicitar al nuevo empleado feedback sobre el mismo de forma que el equipo de Recursos Humanos pueda utilizar estas sugerencias para mejorar sus procesos internos.
Para finalizar, un buen proceso de onboarding tendrá en cuenta tanto lo que tu equipo necesita de la nueva contratación como lo que ese empleado necesita para tener éxito en su función.
Si quieres conocer todos los detalles sobre cómo diseñar un proceso de onboarding exitoso, puedes descargar nuestra guía digital. En esta guía, descubrirás el paso a paso para diseñar desde el proceso de inducción hasta el onboarding de los nuevos empleados de tu compañía.
